Tim es un apasionado jugador de golf. No sólo pasa largas horas jugando en el campo, sino que además es una persona muy activa fuera de él, incluso ha ocupado la presidencia del mayor club de golf de Suecia. Cuando el invierno sueco impide a los golfistas jugar en el exterior, podemos encontrar a Tim y a sus amigos en el interior, disfrutando con el simulador de golf.

Los problemas que llevaron a Tim a optar por los implantes dentales comenzaron en la década de los ochenta. Se le movían dos dientes en la parte derecha del maxilar superior y su dentista no supo determinar el motivo. Por suerte, Tim tenía un buen amigo dentista, que le enseñó cómo cuidar mejor de sus dientes. Con la ayuda de su amigo, evitó que se le cayeran los dos dientes.

Sin embargo, en 1995 sufrió una endocarditis, una enfermedad bacteriana que afecta principalmente a las válvulas cardíacas. No es extraño encontrar casos de pacientes con endocarditis que presentan además infecciones dentales subyacentes. Por ello, se le infectaron los dientes que ya le habían dado problemas anteriormente. Fue necesario extraerlos y le colocaron un puente dental convencional.

Tim llevó el puente alrededor de 12 años y en realidad estaba bastante satisfecho. Sin embargo, una noche que estaba comiendo costillas se fracturó una de las raíces a las que estaba conectado el puente. Ya no había posibilidad de volvérselo a colocar. Después de informarse sobre los implantes dentales como una opción de tratamiento, tomar la decisión fue sencillo. De inmediato aceptó utilizar implantes Dentsply Sirona Implants y en enero de 2008 se los colocaron.

"Nunca pensé que fuera tan sencillo. Me siento muy satisfecho tanto con la función como con el aspecto de mis nuevos dientes. Y comer costillas ya no supone ningún problema".